“We come to this summit following our tradition of calling for unity, solidarity, and peace as conditions for achieving the well-being to which our peoples are entitled,” said Jaentschke, who mentioned fair access to healthcare, education, and work, as well as responsibility in protecting Mother Earth and preparing for the ravages of nature. “It is precisely these difficulties, created by the unjust world order and greed, that have forced thousands of our brothers and sisters to migrate outside their communities in search of better conditions to sustain the lives of their families,” he said.

The official expressed solidarity with those who had to migrate abroad and demanded dignified treatment for those who have returned to their countries. He also agreed with Venezuela’s legitimate demand for the safe return of its migrants and expressed solidarity with those who have been kidnapped and imprisoned, denied all their rights.

Jaentschke welcomed the upcoming China-CELAC Forum Meeting: “We are confident that this mechanism and platform for dialogue and its initiatives will be a good opportunity to exchange ideas and build new bridges of cooperation,” which, in his words, are part of the positions of principle and dignity that are essential for Nicaragua and must be reflected in any CELAC statement.

“The attitude of a few countries, acting to reduce and dilute the principles, heritage, and rich history of our CELAC, has been notorious and consistent (…) The vetoes have been confirmed, and we have identified those who have drawn red lines against our integration efforts,” the official emphasized regarding the Tegucigalpa Declaration, adding that a declaration that does not include the history of CELAC responds to attempts to weaken the efforts of those who want a strong community and aims to divide and reduce its principles to an intolerable minimum.

“Nicaragua expressed at the time and without hesitation that it fully supported the proposal that the Pro Tempore Presidency presented as a draft declaration a month ago. But the actions of those who sabotaged this effort are evident, to the point of proposing a minimized, diluted document that fails to express the major issues and problems facing our peoples in the region and around the world.”

According to Nicaragua, a CELAC declaration must continue to defend the sovereign equality of states, the right to self-determination, territorial integrity, and non-intervention in internal affairs; reaffirm the commitment to defending sovereignty and the right of states to define their institutional and regulatory framework, free from threats, aggression, and unilateral coercive measures and expressing the firm rejection of the aggression and blockade imposed by the United States on Cuba for more than six decades.

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Nicaragua rechazó intento menoscabar ideales fundacionales de CELAC

Tegucigalpa, 9 abr (Prensa Latina) El canciller nicaragüense Valdrack Jaentschke rechazó durante IX Cumbre de la CELAC en Honduras todo intento de menoscabar no sólo los ideales fundacionales de la Comunidad, sino también excluir y desatender los graves problemas que aquejan a los pueblos de la región.

“Llegamos a esta cumbre siguiendo nuestra tradición de llamar a la unidad, la solidaridad y la Paz, como condición para alcanzar el bienestar al que tienen derecho nuestros pueblos”, manifestó Jaentschke , quien mencionó el acceso justo a la salud, a la educación y al trabajo, así como responsabilidad en la protección de la madre tierra y la preparación frente a los embates de la naturaleza. “Son precisamente esas dificultades, creadas por el injusto orden mundial y la avaricia las que han obligado a miles de hermanos y hermanas a migrar fuera de sus comunidades, en la búsqueda de mejores condiciones para sostener la vida de sus familias”, dijo.

El funcionario expresó solidaridad con quienes han tendido que migrar fuera de sus países, y exigió un trato digno para los que son retornados a sus naciones. También coincidió con la legítima exigencia de Venezuela por el retorno seguro de sus migrantes, y expresó solidaridad con los que han sido secuestrados y encarcelados negándoles todos sus derechos.

Jaentschke Saludó la próxima Reunión del Foro China-CELAC: “estamos seguros de que este mecanismo y plataforma de diálogo y sus iniciativas serán una buena oportunidad para intercambiar y abrir nuevos puentes de cooperación,” lo cual en sus palabras son parte de las posiciones de principio y dignidad que para Nicaragua son irrenunciables, y deben estar reflejados en cualquier pronunciamiento de la CELAC.

“Ha sido notoria y constante la actitud de unos cuantos países que actúan con el propósito de reducir y diluir los principios, acervos y rica historia de nuestra CELAC (…) “Han sido constatados los vetos y hemos identificado quienes son los que han trazado líneas rojas a nuestros esfuerzos de Integración”, subrayó respecto a la declaración de Tegucigalpa, añadiendo que una declaración que no incluya la historia de la CELAC responde a los intentos por debilitar los esfuerzos de quienes quieren una comunidad fuerte y tiene el objetivo de dividir y reducir a un mínimo intolerable sus principios.

“Nicaragua expresó en su momento y sin titubeo que respaldaba íntegramente la propuesta que la Presidencia Pro-Tempore presentó como proyecto de declaración hace un mes. Pero la acción de quienes sabotearon este esfuerzo, fueron evidentes y visibles, hasta llegar a proponer un documento minimizado, diluido que no expresa los grandes temas y problemas que enfrentan nuestros pueblos en la región y en el mundo”.

Según Nicaragua, una declaración de la CELAC debe continuar defendiendo la igualdad soberana de los estados, el derecho a la autodeterminación, integridad territorial y la no intervención en los asuntos internos; reafirmar el compromiso con la defensa de la soberanía y el derecho de los Estados a definir su institucionalidad y marco normativo, libre de amenazas, agresiones y de medidas coercitivas unilaterales; y continuar expresando el firme rechazo a las agresiones y el bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba desde hace más de seis décadas.