Military sources quoted by Al-Watan newspaper indicated that positions, fortifications and war vehicles of the terrorist group Levant Liberation Board were targeted in Al-Ankawi locality in Al-Ghab plain in Hama Governorate.
Other military units shelled extremists’ sites in Qalidin and Al-Kahira villages, resulting in the destruction of a number of fixed and mobile targets, and the irregulars’ movements were largely disrupted.
The Syrian Armed Forces’ operations on these fronts were in response to the terrorists’ attack on the government-held villages of Al-Bureij, Kafr Batikh and Dadikh.
In the eastern desert of the country, joint units of the Army and Allied Forces clashed with terrorists of the Daesh groups, registered on the list of international terrorism, leaving several of the radicals either killed or wounded.
In turn, the joint Syrian-Russian air force struck supply lines and ammunition and fuel depots of the terrorists in the desert mountains of Palmyra and Al-Sukhna in the eastern countryside of Homs province, and in Al-Rusafa in the southern desert of Raqa governorate.
Syria faces a war imposed since 2011 and although its army, with the support of its allies Russia and Iran, liberated most of the national territory from radicals, some attacks take place that Damascus attributes to groups supported from abroad to continue destabilizing the country.
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SIRIA-ATTAQUE
Ejército sirio ataca blancos vitales de los terroristas
Damasco, 6 ago (Prensa Latina) Unidades del ejército sirio suprimieron hoy con drones y artillería pesada objetivos vitales de los grupos terroristas desplegados en algunas zonas de las provincias septentrionales de Idlib y Hama.
Fuentes castrenses citadas por el diario Al-Watan indicaron que posiciones, fortificaciones y vehículos bélicos del grupo terrorista Junta para Liberación del Levante fueron atacados en la localidad de Al-Ankawi en la llanura de Al-Ghab, en la gobernmación de Hama.
Otras unidades militares bombardearon sitios de los extremistas en las aldeas de Qalidin y Al-Kahira, lo que causó la destrucción de varios objetivos fijos y móviles, y se interrumpió en gran medida los movimientos de los irregulares.
Las operaciones de las Fuerzas Armadas Sirias en estos frentes fueron en respuesta al ataque de los terroristas contra las localidades de Al-Bureij, Kafr Batikh y Dadikh, que están bajo control gubernamental.
En el desierto oriental del país, unidades conjuntas del Ejército y las Fuerzas Aliadas se enfrentaron con terroristas del grupos Daesh, inscrito en la lista del terrorismo internacional, dejando varios de los radicales entre muertos o heridos.
A su vez, la fuerza aérea conjunta sirio-rusa atacó líneas de suministro y depósitos de municiones y combustible de los terroristas en las montañas del desierto de Palmira y Al-Sukhna en el campo oriental de la provincia de Homs, y en Al-Rusafa en el desierto sur de la gobernación de Raqa.
Siria enfrenta una guerra impuesta desde 2011 y aunque su ejército, con el apoyo de sus aliados Rusia e Irán, liberó la mayor parte del territorio nacional de los radicales, ocurren algunos ataques que Damasco atribuye a grupos apoyados desde el exterior para seguir desestabilizando al país.
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